¿Quién es Fray Tomás de Torquemada?

Tomás de Torquemada (1420-1498), monje español y gran inquisidor, Y es famosos por este hecho. Nació en Valladolid e ingresó muy joven en la orden de los dominicos de la ciudad de dicha ciudad En 1452 fue prior , es decir párroco, del monasterio de Santa Cruz en Segovia y, desde 1474, confesor de los Reyes Católicos, Isabel y Fernando.

Por recomendación de Isabel, el papa Sixto IV lo designó primer inquisidor general de Castilla en 1483. Animado por sus soberanos, hizo toda una reorganización de la Inquisición fundada en en el año 1478

En 1487 fue nombrado gran inquisidor para toda España por el papa Inocencio VIII. Religioso profundo y celoso católico, estaba convencido de que los no católicos y los que decían haberse convertido pero eran convertos falsos (aquellos que solo se convertían para no ser perseguidos), eran capaces de destruir a la Iglesia y al país, por lo que utilizó la Inquisición durante los 11 años siguientes para investigar y castigar a marranos (falsos conversos procedentes del judaísmo), moros, apóstatas y otros a una escala sin precedentes. Como en otros sistemas judiciales europeos de la época, la tortura se empleaba para conseguir declaraciones y pruebas, persiguiendo un amplio abanico de delitos que incluían la herejía, la brujería, la bigamia y el no pago de prestamos.

Cerca de 2.000 personas fueron quemadas en la hoguera durante el mandato de Torquemada, aunque según Juan Antonio Llorente, primer historiador del Santo Oficio, se dice que durante su mandato fueron quemadas más de 10.000 personas y otras 27.000 sufrieron penas infamantes, pero se dice que son cifras totalmente exageradas.

En 1492, la expulsión de los judíos y los moriscos de España.

El nombre de Torquemada, como parte de la leyenda negra de la Inquisición Española, se ha convertido en un apodo para la crueldad y el fanatismo al servicio de la religión.

El cronista español de esa época, Sebastián de Olmedo, lo llamó «el martillo de los herejes, la luz de España, el salvador de su país, el honor de su orden», pero quizá muchos de los que lean esto definiarán a Fray Tomás de Torquemada como: un viejito prejuicioso, con sadismo y fanatismo religioso corriendo por sus venas.